Modelo de gestión para la recuperación de la calidad sanitaria y ambiental del río Rímac por vertimientos domésticos

Abstract

El rio Rimac es la principal fuente de abastecimiento de agua de la ciudad de Lima y de los centros poblados que se ubican en sus riberas en la provincia de Huarochiri, su cercanía a los centros poblados durante su uso la hace vulnerable al daño ecológico por descargas de desagües, desechos sólidos lo cual altera la riqueza hidrobiologica de sus aguas y lo convierte en un riesgo a la salud de la población y elevando los costos del tratamiento con fines de potabilizarla.

La falta de ordenamiento territorial por mandato facultado a las municipalidades agrava esta condición, la ley establece una faja marginal intangible en las riberas del rio con fines de recarga y con fines de protección ante eventuales desbordamientos durante el periodo de avenidas, sin embargo algunos tramos del rio presentan población asentada y siembra de cultivos cuyos terrenos son ganados a través de la construcción de terrazas con material de relleno de desmonte en las riberas consecuentemente las funciones de vigilancia, fiscalización, supervisión municipal y sectorial vienen atravesando por serias deficiencias.

En ese contexto, los resultados de la calidad de agua del rio Rimac, revelan elevadas concentraciones de coliformes fecales producto de los desagües, disminución el oxigeno disuelto por el incremento de materia orgánica aportado por los desagües sin tratar en su mayor parte, con excepción de los efluentes de la Planta de Tratamiento de Carapongo administrada por SEDAPAl, es así como los revelan los resultados de los programas de Vigilancia sectoriales del Ministerio de salud.

La nueva normativa en materia de recursos hídricos busca la preservación y protección del recurso hídrico a través de la explotación racional estableciendo estándares de calidad ambiental para el agua, límites máximos permisible para efluentes tratados, si bien en un marco de gestión multisectorial, las autoridades municipales tienen un escaso protagonismo a pesar que la ley orgánica los responsabiliza por la prestación de los servicios de saneamiento de la población de su jurisdicción en algunos casos encargada a terceros pero descuidando su labor de supervisión.