Ampliación y mejoramiento del sistema de agua y alcantarillado del distrito de Chicama - Trujillo

Abstract

Es mucho lo que puede escribirse aún de modo breve acerca de la importancia del agua coma es también mucho lo que puede decirse sobre el agua potable. No cabe exagerar, es una necesidad vital para la salud pública es esencial para la industria moderna. Un buen abastecimiento de agua es uno de los mejores presentes que puede hacer un ingeniero a su comunidad y así al mismo tiempo una de sus mejores responsabilidades. Los antiguos peruanos nos han dejado señales imborrables de su permanente preocupación por el agua, aunque sus obras eran preferentemente construidas con fines de irrigación, sin embargo, no podemos desligar las de su función prioritaria: el consumo humano. Allí están en la zona Chilca de “maka maka” o “jaqueljes” como se les llamaba en nuestra costa norte, enormes hoyas de 80 a 200 m de diámetro, abiertas en el suelo de nuestra costa para captar el agua filtrada por la naturaleza presentes están también los restos de los canales Taini Encarruni y Talambo que cubrían 100 kilómetros de longitud y que al unir 5 valles formaban el complejo hidráulico de chimú norte. Como un testigo que parece retarnos aparecen los restos del canal de la cumbre construida 1100 D.C. que unía los valles de Chicama y Moche llegando hasta Chan Chan después de recorrer 80 km. ¿Esas presencias sugieren acaso una solución para nuestro problema actual? Esto demuestra brevemente que cuando el hombre empezó a formar sus ciudades el abastecimiento de agua recibió atención preferente de quienes lo gobernaban. El agua ha sido desde los orígenes de la humanidad motivo de permanente preocupación de búsqueda incesante.