Estudio del mercado para la instalación de una fábrica ladrillera en el área de Lima

Abstract

El ladrillo es un material que se ha usado en la construcción desde miles de años atrás. Su fabricación se remonta a los orígenes de la civilización, ya se usaba en Mesopotamia unos 3,000 A.C., igualmente se conocía en Egipto, donde el ladrillo era fabricado mezclándose barro con paja, para luego ser vaciado en moldes rectangulares con un posterior secado al sol. Este mismo procedimiento fue utilizado por los antiguos peruanos para las construcciones preincas e incas. El ladrillo en sí es el mismo a través de toda la historia del hombre, lo que ha variado son las formas de producirlo, habiéndose desarrollado nuevas técnicas de cocido y acabado. A mediados del siglo XIX se desarrolló la primera máquina de producción en serie de ladrillos, que producía unos 1,500 diarios. A partir de ese momento se inició la industrialización en la fabricación de ladrillos. Posteriormente se introdujo la fuerza motriz producida por el vapor, para luego desarrollarse el horno cíclico, que permitió llegar al descubrimiento del horno túnel. Últimamente con las maquinarias modernas, que son de gran capacidad, se puede llegar a una producción de 70 tn/hr. E1 ladrillo hoy en día es el mejor material que se puede utilizar en construcción y no existe, en nuestro medio, algún producto que pueda sustituirlo, debido a las características propias del ladrillo y que transmite a la construcción, como son: solidez, durabilidad, temperatura ambiente ideal etc. Los sustitutos del ladrillo que podrían hacerle competencia son: el adobe estabilizado, el ladrillo de cemento o de cal y materiales usados en casas prefabricadas. El adobe estabilizado es un adobe con pequeña proporción de asfalto, y es de fabricación fácil, pero es crudo, o sea que no recibe un proceso de cochura, por lo que no presenta mucha resistencia. Este material ayudaría a combatir el problema de vivienda donde la industria ladrillera es incipiente. En cuanto al ladrillo de cemento, no se puede comparar al de cerámica por ser de menor calidad y distintas propiedades mecánicas, aunque puede ser más barato debido a que muchas veces es hecho en la misma obra, evitándose así los gastos inherentes a una industria. Este procedimiento es usado por contratistas que construyen antes de tener un cliente, para luego vender la casa terminada.