Calefacción y refrigeración utilizando aire como fuente y sumidero de calor

Abstract

Mucho se habla, y todos los días es posible de comprobar de que cuanta más comodidad sienta una persona durante la realización de una labor, mayor será lo producido en cuanto a cantidad y calidad. Es casi innecesario explicar el proceso por el cual la sensación de confort puramente física en un principio se traduce luego en un estado anímico equilibrado que es un factor tremendamente favorable para la realización positiva de actividades físicas o mentales, sobre todo si éstas deben realizarse en forma sedentaria, con escasa o nula necesidad de desplazarse a otros lugares. Cuando ya no se trata de laborar sino de habitar o descansar en un local, es indudable que la existencia de confort es completamente deseable para la realización de actividades inherentes al lugar y para lograr una real recuperación física y mental. Un factor de los que más gravemente denota su influencia en este sentido es el clima. Desde tiempos inmemoriales una de las preocupaciones vitales del ser humano fue el de protegerse de sus alteraciones. Así desde sus primitivas vestimentas y viviendas ha evolucionado basta lograr tejidos que brindan el aislamiento conveniente para cada clima, construir viviendas y centros de trabajo en las cuales puede controlar las características ambientales en que vive, acomodando su temperatura, humedad, pureza, etc. de tal manera que el calor que libera su organismo por su condición de máquina transformadora y utilizadora de energía, y el que recibe del sol y medio ambiente alcancen el equilibrio si es posible óptimo para su funcionamiento sin que se produzcan alteraciones inconvenientes o daños (enfermedades broncopulmonares, trastornos en la digestión por calor excesivo, sobrecarga de bombeo para el corazón, dolores de cabeza, etc. ) y para que exista la sensación de comodidad que implique una mayor eficiencia de actividad. Este trabajo por tanto se dedica a estudiar una de las formas como, es posible mediante el ingenio humano gobernar la dirección en que fluye la energía con el objeto de establecer condiciones agradables, en cuanto a clima, es decir, Cómo realizar la calefacción o la refrigeración de un local según sea necesario, mediante un solo sistema que utiliza el aire exterior al local como fuente y sumidero de calor (según se trate de calefacción o refrigeración). Se ha escogido este sistema por ser de posibilidad de aplicación casi universal, puede ser compacto y es por tanto aplicable para residencias, oficinas y locales comerciales pequeños.