La relación entre la intervención con el programa nacional de asistencia solidaria pensión 65 y los niveles de pobreza en los adultos mayores de 65 años más

Abstract

El presente trabajo pretende estudiar la relación entre la intervención con el Programa “Pensión 65” y los niveles de pobreza en los adultos mayores de 65 años a mas, que según las cifras del Instituto Nacional de Estadística e Informática – INEI, para estos últimos cuatro años (2011- 2014), la población adulta mayor ha ido aumentando progresivamente, que para el año 2011 fue de 8.79% y para el 2014 el 9.43% de la población total, siendo Lima el departamento que concentro el mayor número de adultos mayores con un 35.58% de la población adulta mayor, así mismo se observar que para el 2014 el 53.31% de la población adulta mayor total son mujeres, mientras que el 46.69% son hombres, ocurriendo el fenómeno conocido como feminización del envejecimiento, que significa que las mujeres viven más años que los hombres, en la medida que avanzan en edad. Así mismo la población adulta mayor de 65 años a más para el 2014 fue del 67.88% de la población adulta mayor.

Por otro lado la población adulta mayor de 65 años a más en situación de pobreza represento el 12.61%, mientras que la población adulta mayor de 65 años a más en situación de pobreza extrema represento el 2.37% de la población adulta mayor. Tras la implementación del programa Pensión 65, hasta el 2014, ha incorporado a 450 000 adultos mayores de 65 años a mas, estando presente en 1838 distritos a nivel nacional, y representando el 22.80% de la población adulta mayor de 65 años a más, y el 15.48% de la población adulta mayor.

La incorporación de adultos mayores de 65 años a más del programa depende de la identificación de adultos mayores en situación de pobreza extrema la cual es determinada por el Sistema de Focalización de Hogares – SISFOH, cuya vigencia es de 3 años.

Por lo tanto, se concluye que el programa Pensión 65, brindar protección a un sector especialmente vulnerable de la población, y entrega una subvención económica de 250 nuevos soles bimestral por persona, y con este beneficio contribuye a que los adultos mayores tengan la seguridad de que sus necesidades básicas serán atendidas, que sean revalorados por su familia y su comunidad, y contribuye también a dinamizar pequeños mercados y ferias locales.