Pasivos de seguridad y salud ocupacional por accidentes de trabajo

Abstract

En el presente informe se identificarán los vacíos existentes desde nuestra legislación laboral sobre las condiciones laborales de los peruanos que adquirieron alguna forma de discapacidad por accidentes de trabajo y enfermedades profesionales. El recurso humano es el elemento que dinamiza a toda organización laboral, de ahí que se requiera una dotación adecuada de éste, a fin de brindar un servicio oportuno, de calidad y libre de riesgo para el usuario, el trabajador y la organización. Cuando el trabajador se ausenta del trabajo, conlleva una serie de problemas que afecta la eficiencia de la prestación de los servicios. Las causales de una discapacidad por accidentes de trabajo son diversas, especialmente en la construcción civil y minería. En el Perú, las personas con discapacidad afrontan muchos obstáculos que dificultan su plena participación en la sociedad, sufren un acceso restringido o nulo al entorno social y a los servicios; desempleo; falta de acceso a educación adecuada; escasez de rehabilitación integral; falta de elementos auxiliares; estigmatización y compensación insuficiente de los costos adicionales derivados de la discapacidad. Por si fuera poco, la discriminación que sufren muchas personas con discapacidad aumenta su pobreza y exclusión social, lo que constituye un problema ético, social, político y también económico. Las personas con discapacidad afrontan dificultades que van desde, la falta de oportunidades laborales dignas, pasando por la discriminación, barreras físicas y mentales; así como el comportamiento de los empleadores, que entorpecen su participación en las empresas. Muchas de estas barreras, como las del entorno, el acceso a educación, salud, empleo o a las comunicaciones, sin embargo, podrían eliminarse con medidas adecuadas. Otras barreras, basadas en prejuicios y actitudes, requieren de campañas de sensibilización social y cambios en la forma como se ve y se trata el tema. Pero eliminar todas las barreras exige el compromiso y la colaboración de todas las partes: de las personas con discapacidad, sus familiares, el Estado y la comunidad. En el mundo aproximadamente 650 millones de personas tienen discapacidad. Es decir que cerca del diez por ciento de la población entera tiene algún tipo de discapacidad; el 80% se encuentran en países en vías de desarrollo. En el Perú, son cerca de 3 millones; 8 de cada 10 son pobres y donde el 94% de las personas con discapacidad que pertenecen a la población económicamente activa del Perú están subempleadas o sin trabajo. Las Naciones Unidas nos informan que el 87% de los casos de discapacidad, son adquiridos en accidentes comunes, laborales, de tránsito y guerra . Las Personas con Discapacidad y sus familias están claramente en una situación vulnerable, con escasas posibilidades de superar la marginación, discriminación y exclusión social al que se ven obligados a enfrentar. La información de diversas realidades a nivel mundial considera a los accidentes de trabajo como una importante causa de absentismo laboral. En aquellas empresas donde la prevención, instaurada en programas ha sido incorporada a las políticas de negocios y de producción empresarial, las tasas de accidentalidad son bajas, por ejemplo en Chile se reporta una tasa de accidentabilidad aproximada de 5%, pero en aquellas empresas donde la prevención sigue olvidada o simplemente la tienen sólo en el papel como un documento de requisito que cumplir frente a las inspecciones de los Ministerios de Trabajo, las tasas o la gravedad de los accidentes sigue siendo alta, debido a que no existe una correcta supervisión de las informaciones brindadas. Para conocer el impacto de los accidentes de trabajo en una sociedad, la Organización Internacional del Trabajo (OIT) ha informado que sólo en EE.UU., se estima que el costo de los accidentes de trabajo y enfermedades ocupacionales, representa aproximadamente el 4 % del PIB anual. En el Perú, lamentablemente no existe información sobre los costos generados por los accidentes de trabajo, ni de las enfermedades profesionales debido a que en el formato de reporte de accidentes (MINTRA) no se exige esta información y aún son pocas las empresas las que reportan la información completa. Por ende, tampoco existe un control y relación de los discapacitados a consecuencia de los accidentes de trabajo, menos aún de aquellos con secuelas de enfermedades profesionales. En la última década, se promulgaron varias leyes en favor de las Personas con Discapacidad en el Perú, y en el 2012 se promulgó la Ley General de la Persona con Discapacidad Ley Nº 29973, con el apoyo del Consejo Nacional para la Integración de la Persona con Discapacidad (CONADIS) y la Ley General de Salud Nº 26842, que establece el derecho al tratamiento y la rehabilitación de cualquier persona que adolece de discapacidad física, mental o sensorial. La Ley Nº 29973, garantiza que las Personas con Discapacidad (PCD) no sean discriminadas en la educación, en la salud y en el acceso al empleo. También a que cuenten con las condiciones de acceso a la infraestructura de su ambiente de trabajo.