Construcción de viviendas por el sistema de autofinanciación

Abstract

La finalidad del presente trabajo es tratar de dar o plantear una de las posibles soluciones para resolver el problema social más angustioso que tiene nuestro país, como es el problema de la vivienda popular. Como es de conocimiento público en nuestro país, se está llevando a cabo un proceso de Urbanización, mediante la migración del campo a la ciudad de las poblaciones rurales, que en su mayor parte están totalmente discriminadas por la ausencia de leyes laborales que las amparen; reciben salarios muy por debajo de los que rigen en las ciudades; se les ofrece resistencia para pagar precios adecuados a sus productos agropecuarios y por el nivel de existencia infrahumana en que viven en sus respectivas localizaciones de origen. Estas poblaciones al emigrar generan comunidades urbanas heterogéneas por su procedencia y en contraste con sus comunidades de origen, donde la mayoría de sus integrantes nacidos en la misma zona o en sus alrededores, han compartido tradicionalmente de iguales aspiraciones y tenido las mismas normas y valores definiendo una forma de vida que les permite desenvolverse con seguridad en el medio que los rodea; los campesinos al llegar a la ciudad se encuentran dentro de un ambiente muy diferente al que hasta antes de salir del campo había orientado su conducta individual y colectiva. Este cambio brusco genera en él una situación de des ambientación o desajuste, que, al no poder ser superada, es la causa en gran parte de que los grupos de población procedentes de la zona rural permanezcan marginados sin integrarse a la sociedad dentro de la cual están viviendo. Esta situación trae como consecuencia una crisis de la institución familiar, predisposición a la violencia como un medio de liberación no efectivo para cambiar de ambiente y un estado de asistencialismo que presupone la incapacidad o impotencia de los beneficiarios, de su acción para resolver sus propios problemas, creando en ellos un sentimiento de dependencia hacia las personas e instituciones que realizan su función de manera paternalista. Por esto he pensado que se debe tener al hombre como factor primordial como objeto y sujeto de su acción y partiendo de que el Estado no cuenta con los recursos necesarios para resolver por sí solo el "problema de la vivienda”, se debe tomar en cuenta el potencial de las comunidades fijando al individuo como "sujeto de su desarrollo”. Con este concepto se podría emprender la solución de la construcción de viviendas de carácter social, tanto por el sector público como por el sector privado y que el ingeniero civil podría ser el “promotor” de programas de vivienda por el sistema de “Autofinanciación”, como agente de cambio para promover y organizar la acción a realizarse y para capacitar a las comunidades, dándoles una participación consciente y organizada para la solución de su problema y lograr que los recursos que se invierten den así el resultado esperado, dotando al individuo de una vivienda de acuerdo a sus necesidades, lo que constituye a su vez un recurso básico para su desarrollo integral.