Metodologías de formulación y evaluación de proyectos : el caso de la evaluación social

Abstract

Una de las preocupaciones fundamentales de la economía, tal como se enseña en los Programas de Economía, es la asignación adecuada de los recursos. Mas, hasta después de la segunda guerra mundial, y en el contexto del mundo occidental, la teoría y la práctica de la asignación adecuada de los recursos se limitó al campo empresarial a pesar de que ya en la década del '30 se requirió la intervención del Estado para la conducción de la actividad económica nacional. La teoría Keynesiana ocupa un puesto estelar como fundamentadora de la teoría para la política económica de la conducción de las economías consideradas como un todo, pero no proporciono instrumentos para la asignación de recursos a nivel sectorial o local tomando como punto de partida el contexto general de la actividad económica; esta es precisamente la preocupación de la Teoría de la Evaluación Social de Proyectos. La Evaluación Social de Proyectos tiene expresiones acabadas solo a partir de la década del '60, no obstante, sus bases conceptuales se encuentran en la teoría Neoclásica de fines del siglo pasado y que las investigaciones al respecto comienzan en la década del '50. En la actualidad se presentan más de una posición metodológica para la evaluación social de proyectos. La preocupación central del presente trabajo es sustentarlas y señalar sus diferencias y alcances. La exposición del presente trabajo empieza con la sustentación de los métodos y técnicas de evaluación comúnmente aceptados en nuestro medio. Esto es necesario por dos motivos: porque así es posible trazar el quehacer evaluativo empresarial definiendo sus límites; y porque entre la evaluación empresarial y la evaluación social existe cierta similitud, como se podrá comprobar en el transcurso del presente trabajo (los indicadores que utilizan son los mismos). Sin embargo, la similitud es fundamentalmente de forma a pesar de que ambas se sustentan en el enfoque neoclásico. Esto se debe a que la evaluación empresarial se levanta sobre la teoría de la demanda y de la producción, mientras que la evaluación social se levanta sobre la economía del bienestar, donde la teoría del bienestar es la sustentación neoclásica del comportamiento de todos los mercados integrados. En esencia, se puede considerar que la evaluación social puede utilizar la información bruta que proporciona la evaluación empresarial, la cual es transformada con la utilización de factores de ponderación llamados precios de cuenta o precios sombra.